Un día para ver El Barco de Ávila
El Barco de Ávila, es la cabeza natural de la comarca formada por los Valles del Tormes y del Aravalle. Al hallarse en las inmediaciones de la Sierra de Gredos, sus inviernos son fríos y los veranos, suaves.
Un gran plan para un día de escapada, o como parte de un fin de semana por la zona en uno de los muchos alojamientos rurales disponibles, es visitar esta antigua villa.
Sobre las aguas del Tormes, un Puente de la Edad Media que conduce a la Ermita del Cristo. Entre el río y la montaña, el Castillo de Valdecorneja, del Siglo XV, cuando el señorío del mismo nombre pasa a formar parte de la Casa de Alba.
El tiempo ha conservado parte de su muralla, y el Arco del Ahorcado. La Iglesia La Asunción de Nuestra Señora recuerda a la Catedral de Ávila, y posee un coro muy interesante.
Existen dos salas de exposiciones, la Cárcel Antigua y la Casa del Reloj.
Declarada Conjunto Histórico-Artístico, conserva elementos urbanos y edificios significativos declarados bien de interés cultural.
Os proponemos una ruta visitando primero la Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora, situada en el centro de la localidad, y La Casa del Reloj, que fue una antiquísima Casa Consistorial que se derribó en el siglo XVIII y se alzó de nuevo con paredes de piedra labrada y mampostería de inconfundible traza castellana, es ahora oficina de turismo y sala de exposiciones.
La Calle de La Gallareta, nuestro siguiente destino, es la calle más corta y estrecha del pueblo, llena de historia. Un poco más allá, en las afueras, econtramos el Puente Románico.
Cruzando el puente está la Ermita del Cristo,de tradición muy antigua. Se cuenta que, por el siglo XIII, una gran crecida del Tormes arrastró, no se sabe desde dónde, un Cristo de madera de tamaño natural que quedó orillado junto al puente. Lo vieron unos caminantes y junto a la gente del pueblo lo condujeron en procesión a la iglesia parroquial, donde se dejó. A la mañana siguiente volvió a aparecer en el mismo sitio, lo llevaron de nuevo a la iglesia. Al día siguiente ocurrió igual.
El Castillo de Valdecorneja, cuya vista domina el horizonte,corona el río y el puente, es el punto más elevado del valle y nuestra siguiente parada. Construido sobre un castro vetón que fue destruido por los romanos.
Callejeando por El Barco de Ávila podremos encontrar otros puntos de interés como el Edificio de la Cárcel que alberga la Biblioteca Muncipal, el Aula Mentor, y tres amplias Salas de Exposiciones.
La Casa de los Balcones Situada en la Calle Mayor, la Casa de Recaudación de bonitos ventanales, la Ermita de San Pedro, los restos de Las Murallas...
Y qué mejor manera de completar nuestra visita de un día a este pueblo con encanto que disfrutar de las famosas y reconocidas Judias y Judiones de Denominación de Origen protegida. Asados y guisos de carne y caza, legumbres y hortalizas de la tierra y como no, el Chuletón de Ávila, son tambien excelentes en la comarca.
Puedes ampliar información en su web oficial aquí.
Visitar El Barco es una escapada de un día que puede hacerse en cualquier época del año, en pareja o familia, en la que naturaleza, cultura y gastronomía encuentran su mezcla perfecta