Cinco Villas con mucho encanto

La Mancomunidad Barranco de las Cinco Villas se encuentra en la comarca del Valle del Tiétar, al sur de la provincia de Ávila. Está integrado por los municipios de Cuevas del Valle, Mombeltrán, San Esteban del Valle, Santa Cruz del Valle y Villarejo del Valle, accesible desde el Puerto del Pico por la N-502.

Este espacio, de gran valor natural y suave microclima, ofrece al visitante la posibilidad de practicar numerosas actividades de turismo activo, sin olvidar su importante patrimonio cultural.

Cuevas del Valle

Cuevas del Valle está situada a los pies del Puerto del Pico. Es la población que se encuentra a mayor altitud y por tanto la primera de las villas del Barranco de las cinco Villas. El nombre de Cuevas probablemente provenga del gran número de casas antiguas que cuentan con una cueva en su planta baja.

Por este pueblo pasa la calzada romana construída en los siglos I y II a.C, que conectaba Extremadura con la vía de la Plata siendo una de las calzadas mejor conservadas de España. Fue usada por los romanos en la conquista de la península, y luego entre los siglos XIII y XIX, por la Mesta para la trashumancia de ganado. La calzada romana comienza en el mismo pueblo y acaba en el Puerto del Pico.

Recorriendo el pueblo podemos contemplar sus calles y sus casas de piedra con grandes balcones de madera, el pueblo queda protegido por la Rubía el Torozo lo que hace que las temperaturas sean suaves.

En el Casco viejo se encuentran la calle Real, la del Ayuntamiento Viejo y la de los Soportales, éstas calles conservan aún todo el sabor y belleza de la arquitectura popular de la zona: bajos de mampostería de granito sobre los que se alzan entramados de madera y ladrillo, con balcones volados de tabla recortada y grandes aleros. Calles sinuosas y empinadas que evocan otros tiempos.

La Iglesia Natividad de Nuestra Señora de estilo gótico data de finales del siglo XV. La Ermita Virgen de las Angustias construida en 1637, acoge a la patrona de Cuevas del Valle. La Ermita de San Antonio se cree que fue levantada por trashumantes, alberga a San Antón patrón de los animales.

El Rollo o picota símbolo de la independencia jurídico-administrativa del Señorío de Mombeltrán, dada por Carlos II en 1695.

El Ayuntamiento viejo es el antiguo edificio del Ayuntamiento, ha sido restaurado respetando la arquitectura tradicional de la zona.

Mombeltrán

La Villa de Mombeltrán pregona su pasado señorial desde lo hodo del Barranco. El esplendor de la antigua Colmenar resalta en el castillo, la magnífica iglesia o la profusión de casas blasonadas que circunda la Corredera. La villa fue refugio de Juana la Beltraneja en la sucesión del Trono de Castilla.

El Castillo de los Duques de Alburquerque de finales del s. XV, es de planta rectangular con cubos de planta circular en las esquinas, una de ellas sirve de Torre de homenaje. Los muros están rematados en matacanes almenados. Desde su posición se domina todo el barranco.

El Hospital de Peregrinos de San Andrés fue fundado en 1517, en el que destacan su portada renacentista y el patio, que aún conserva el enlosado primitivo.

La Iglesia de San Juan Bautista data de siglo XIV-XV. Declarada Monumento Histórico Artístico acoge en su interior valiosas pinturas, esculturas y rejas.

La Cruz del Rollo símbolo de la obtención del título de villazgo, en 1393. Sus Casas blasonadas son viviendas señoriales, de origen medieval. Destacan por su tamaño, calidad constructiva y sobre todo por la presencia de escudos heráldicos en sus fachadas.

La Ermita de Nuestra Señora de La Soledad de grandes dimensiones, está situada en el parque del mismo nombre. El Ayuntamiento de estilo toledano, con una armoniosa combinación de mampostería, sillarejo y fábrica de ladrillo, se encuentra en una plaza en la que destacan la fuente y un callejón bajo grandes arcos de piedra.

A unos 4 kilómetros encontramos el paraje natural de Playas Blancas, sus fantásticas pozas naturales de aguas cristalinas son ideales para zambullirse en verano.

Villarejo del Valle

Entre bancales de olivo por debajo del pinar surge Villarejo del Valle, a la solana y resguardado de los vientos del norte. Sus calles de sabor popular se enamoran y funden con el telón de fondo del Torozo: eterno vigía en lo más alto del Barranco.

Muy conocidos son sus encierros de toros durante las fiestas de agosto y septiembre. En Semana Santa se cantan Los Romances de Lope de Vega y se juega la tradicional juego de Las Caras.

La Iglesia de San Bartolomé de estilo gótico isabelino data de siglo XV. Destacan en su interior tres retablos barrocos y el órgano.

La arquitectura popular tiene buenos ejemplos en las calles Mayor, de la Estrella y San Bartolomé. El Ayuntamiento es un edificio tosco que mira a la plaza con su fachada de mampostería y ladrillo. La Ermita de Nuestra Señora de Gracia en honor a la patrona de Villarejo, construida en sillería de granito y con una bella fachada porticada.

El Rollo o picota como en otros pueblos, símboliza la independencia de Mombeltrán en 1694, único en el Barranco de las Cinco Villas con tres cabezas en lugar de cuatro, se encuentra junto a una fuente de 1837.

La Ermita de San Antón del s. XVII. Destaca en su interior el bello altar de cerámica talaverana. Vivienda del músico López Álmagro compositor y catedrático de armonio que vivió sus últimos años en Villarejo.

Monumento a la cabra montés escultura de un macho montés creada por el escultor Nacho Martín en el año 1994 para conmemorar el tercer centenario de la Carta de Villazgo y la consiguiente independencia de Mombeltrán.

Monumento a los arrieros hecho en forja y colocado en el paredón de la Plaza de España. Hecho en honor a los arrieros de la localidad una profesión muy común en la historia del municipio.

San Esteban del Valle

San Esteban del Valle, en otro tiempo 'San Esteban del Castañar', esconde un caserío apretado de callejuelas estrechas y empinadas flotando en un mar de viñas y olivar. La importante figura de la iglesia destaca, majestuosa, sobre las casas que se apiñan en torno al mítico pilón.

De interés turístico regional son las fiestas en honor a San Pedro Bautista con su tradicional Vítor; procesión a caballo acompañado de luminarias al anochecer rememorando la vida del primer mártir del Japón.

La Iglesia de San Esteban data de estilo gótico isablelino data del siglo XV. Desde su emplazamiento se domina todo el Barranco. Conserva la pila bautismal donde fue bautizado San Pedro Bautista, patrón de la localidad.

El Pilón fuente característica en granito, de principios del siglo XVI.

La Capilla de San Pedro Bautista construida en la casa natal del Santo. Realizada con sillería de granito, destaca la portada con arco de medio punto. La Ermita de San Andrés se encuentra en un otero camino de Santa Cruz del Valle. Posiblemente date del siglo XVI.

El Rollo o picota Emblema de la independencia jurisdiccional de Mombeltrán, en 1693. Ayuntamiento del siglo XVIII, destacan sus paredes de sillería de granito y las ménsulas en madera del alero.

Cuevas del Arroyo antiguas cuevas usadas como despensa, hoy están casi todas rehabilitadas.

Parques de Cuatro Caminos y de Don Felipe Robles Dégano

Santa Cruz del Valle

Santa Cruz del Valle se encuentra encajonada en un pequeño vallecito al pie de la imponente pero suave orografía del Monte de La Abantera. Colgado en su ladera este, es la villa que ofrece las mejores vistas del Barranco; cualquier punto de su entramado urbano hace de improvisado mirador. Las pinturas murales de sus fachadas ponen la nota original al pueblo.

Casco urbano muy pintoresco, con calles y casas, fuentes y bellos rincones que se amoldan a la empinada pendiente. Descubriremos varios pasadizos, que consiguen unir calles adyacentes de manera sencilla; y muretes bajos, perfectamente rematados con albardillas de granito labrado; todo ello crea una sensación de laberinto urbano muy agradable.

Museo del aceite de oliva visita guiada a una antigua almazara en la que se muestra todo el proceso de producción del aceite.

Rollo o picota como en los demás pueblos del barranco este símbolo representa la independencia de Mombeltrán en 1791, realizado en granito azul sobre un gran bloque natural.

Llama la atención el gran tamaño de la pieza del remate, muy diferente a la de los otros rollos del Barranco, y el buen estado de los detalles del labrado de la piedra, quizá debido a la poca edad del conjunto.

Pinturas murales principalmente de temática etnográfica, en las fachadas de las viviendas. Iglesia del siglo XVI construida con mampostería de granito y con una fachada de sillería y arco de medio punto en la entrada. Ermita de San José del siglo XIX en su interior se guarda una imagen del santo del siglo XVIII.

Lavaderos públicos Realizados en granito, con la forma idónea para su cometido.