Manjabálago está situado en la vertiente septentrional de la sierra de Ávila.
Forma municipio con la localidad de Ortigosa de Rioalmar y dista 35 km de Ávila, 81 km de Salamanca y 149 km de Madrid.
Su término se extiende por la vertiente septentrional de la sierra de Ávila.
Ambos pueblos nacen en la Edad Media y aparecen citados documentalmente por primera vez en 1250, formando parte del cabildo de Rioalmar, uno de los territorios en que, a efectos de consignación de rentas, estaba organizada en la Edad Media la diócesis de Ávila.
A efectos políticos, administrativos y judiciales, Manjabálago y Ortigosa fueron siempre lugares del rey. Eran concejos de aldea que dependían directamente de la jurisdicción del concejo de Ávila y estaban integrados en el sexmo de San Pedro, uno de los siete sexmos es que estuvo dividida la tierra de Ávila hasta su disolución en el siglo XIX.
El concejo de Ortigosa fue utilizado en el siglo XVI por parientes de Santa Teresa tratando de buscar un título de hidalguía.
En el siglo XIX, según el Diccionario de Madoz, en Manjabálago había una casa palacio, perteneciente a un particular, y, en Ortigosa, una casa bastante buena, propiedad del señor marqués de Tamames.
Iglesia de San Miguel Arcángel